Stand by

Hola gente que me lea…La semana pasada empecé el segundo semestre del master que estoy haciendo y entre el trabajo, los deberes y eso no voy a tener mucho tiempo para escribir. Además uno de los trabajos para una asignatura es escribir un blog sobre sustainable cities, así que nada más informaros que voy a estar por otros lares hablando de otras cosas.

Besitos!

Este es el link por quien esté interesado (en inglés, claro):

http://greenbeansinthecity.wordpress.com

 

Quinto Informe_El viaje

Regreso al pasado! Voy a resumiros un poquillo el viaje, por si os animáis a venir a las (casi) antípodas.

Llevamos un mes aquí y no os hemos contado el primer día de la aventura.

Salimos de Madrid el día 17 de Julio a eso de las 22h y llegamos a Sydney a 7 am del 19 de Julio, después de unas 24 horas de avión más otras 7 en los aeropuertos.

Despedida en la T4.

En la despedida aguanté como una campeona y, creo, que no lloré, pero he de confesaros que tras pasar los controles eché unas cuantas lagrimillas…En la T4 no pasó nada interesante, así que embarcamos y nos pusimos rumbo a Dubai.

Primer avión.

Emirates está genial, tienes una especie de consola con series, pelis y juegos. Puedes jugar en red con otros pasajeros y te dan una mantina y un cojín. Ramin y yo intentamos ver una peli sincronizados, lo cual no fue fácil, pero más o menos conseguimos…Yo había pedido menús especiales, para el primer vuelo con pescado y en el segundo vegetariano. La comida está muy bien para ser de avión y como tenía menú especial me servían antes que a los demás, lo cual agradecí varias veces, por que pasé un hambre canina todo el camino….En total nos dieron unas 5 comidas, creo que 2 en el primer vuelo (7h) y 3 en el segundo (17h).

Comida del avión.

El camino Madrid-Dubai intentamos mantenernos despiertos para caer rendidos en el segundo trayecto y lo conseguimos bastante bien. Llegamos a Dubai a las 6h am del 18 y hacían 36ºC, es el desierto, claro! El aeropuerto de Dubai me recordaba a la peli Código 46 y no pudimos estar mucho por que solo teníamos un cambio de hora y algo y es un aeropuerto bastante grande. Es curioso por que ves a europeos, asiáticos, africanos y gente de oriente medio todos juntos.

Consola.

Total que volvimos a embarcar con todos nuestros bártulos (2 mochilas con portátiles y dos maletas de mano) y pusimos rumbo a Bangkok. En teoría el avión solo hace una parada técnica a repostar pero no os engañéis te hacen bajar con todo.

Bangkok

En el trayecto Dubai-Bangkok-Sydney intentamos dormir todo lo que pudimos ya que en este trayecto teníamos vecina. En el anterior, nuestros asientos estaban en la parte de atrás y solo eran de dos, en el segundo avión estábamos en la parte de tres asientos, así que era un poco más incómodo, pero como yo duermo casi en cualquier lugar no me costó tanto como a Ramin.

Lo peor fue al bajar en Bangkok, ya que tuvimos que pasar por dos controles de equipaje de mano (ya eran el 3º y el 4º, ya que en Dubai también tienes que pasar un control…). El 3º fue el típico de toda la vida (aunque mi maleta la escanearon dos veces, creo que demasiados discos duros y portátiles…), pero el 4º era específico del gobierno australiano y te abren la maleta y tocan tus cosas, así que hay que mostrarse colaborativo. Hubo un señor que retrasó el asunto por que se puso a discutir con los de seguridad, un rollo!

Segundo amanecer.

Total, último trayecto, intentamos dormir y llegar a Sydney descansados. Aterrizamos viendo amanecer y nos hacen rellenar el típico papel (parecido al de USA) pero con preguntas tipo ¿Llevas madera, semillas, material orgánico, comida? Pusimos a todo que no y nos dirigimos a la cola del control de inmigración donde los cachondos pusieron la música de Misión Imposible. No me acuerdo cuánto tiempo estuvimos en esa cola, pero como hora y media. En ese tiempo pasan unos tipos de aduanas a preguntarte otra vez si tienes algo que declarar (como tierra en tus zapatos!) y te sella el papelito que has rellenado antes.

Pasamos el control y nuestras maletas estaban ahí esperándonos! Me equivoqué de salida, pero no pasó nada y fuera nos estaban esperando Toran y Nazanin con un globo de Welcome to Australia, que todavía tenemos en casa.

Nuestra llegada a Sydney.

Nosotros y nuestras cosas.